Intervención de los artistas Enrique Espínola y Jorge Salas
Los barrios se preparan para la llegada de este momento en el que se celebra la Noche de los Museos. Una tradición que este 2010 nos encuentra a Cortina abierta hogar/galería en convergencia con La Paternal Espacio Proyecto.
...
Enrique Espínola y Jorge Salas se apropian de una de las habitaciones de la residencia para convertirla en santuario, frontera obligatoria entre la vida y la muerte. La serie de dibujos de Salas “Pulsión Vegetal”, suplican un renacer, solicitan un lazo-soga con la vida sin intermediarios más que la propia luz de la creación.
Asimismo, la instalación-objeto “Tupa” (cama con flores sintéticas y pasto natural) de Espínola nos pone frente a la delicada línea entre la salud y la enfermedad. Una recámara tenue donde el pasto crece para limpiar-barrer todo rastro de indolencia. Las flores artificiales no son más que la mueca necesaria de esa esperanza que no se pierde, intacta, a pesar del paso del tiempo y lo que ello acarrea.
Una performance-instalación “Tributo” circulo de yerba mate, la silla, el artista frente al espejo leyendo poemas en guaraní transcurrirá en esa mirada a sí mismo que se-nos recita en lo profundo del nexo dolor-amor que significa vivir la vida.
Con “ Segunda piel” la fachada de una casa es intervenida en las intersecciones de Espinosa y Álvarez Jonte , motivos vegetales en gran formato se reapropian del espacio-vivienda reconfigurándolo.
La Noche de los Museos es una fiesta para ser vivida con la simple excusa de encontrarnos y reflexionar.
Natalia Saenz Valiente, 13 de noviembre 2010
Los barrios se preparan para la llegada de este momento en el que se celebra la Noche de los Museos. Una tradición que este 2010 nos encuentra a Cortina abierta hogar/galería en convergencia con La Paternal Espacio Proyecto.
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Enrique Espínola y Jorge Salas se apropian de una de las habitaciones de la residencia para convertirla en santuario, frontera obligatoria entre la vida y la muerte. La serie de dibujos de Salas “Pulsión Vegetal”, suplican un renacer, solicitan un lazo-soga con la vida sin intermediarios más que la propia luz de la creación.
Asimismo, la instalación-objeto “Tupa” (cama con flores sintéticas y pasto natural) de Espínola nos pone frente a la delicada línea entre la salud y la enfermedad. Una recámara tenue donde el pasto crece para limpiar-barrer todo rastro de indolencia. Las flores artificiales no son más que la mueca necesaria de esa esperanza que no se pierde, intacta, a pesar del paso del tiempo y lo que ello acarrea.
Una performance-instalación “Tributo” circulo de yerba mate, la silla, el artista frente al espejo leyendo poemas en guaraní transcurrirá en esa mirada a sí mismo que se-nos recita en lo profundo del nexo dolor-amor que significa vivir la vida.
Con “ Segunda piel” la fachada de una casa es intervenida en las intersecciones de Espinosa y Álvarez Jonte , motivos vegetales en gran formato se reapropian del espacio-vivienda reconfigurándolo.
La Noche de los Museos es una fiesta para ser vivida con la simple excusa de encontrarnos y reflexionar.
Natalia Saenz Valiente, 13 de noviembre 2010
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